La vida humana es demasiado corta para el trabajo de la inteligencia, ochenta o noventa años es poco para esto. Lo que nos plantea la cuestión: “pero si existe una vida después de la muerte, ¿es posible continuar después?”. Esta es, sin dudas, una cuestión interesante; porque si existe una vida después de la muerte, ésta es netamente espiritual. Por ende, si usted ha llevado una vida como la de un buey, preocupándose únicamente en pagar deudas y solucionar susodichos problemas, esta vida que fue generada será mucho peor para usted. De haber una vida netamente espiritual, en la cual esta vida (terrenal) no exista más; o sea, todo aquello que te definía como persona no existe más, ella solamente será interesante de alguna manera, únicamente para quien, durante su vida en este mundo, se interesó de algún modo por alguna actividad que fuese (ella misma) puramente espiritual. ¿Queda claro esto?
Únicamente aquella persona que dedicó su vida, todos los días, una o dos horas para este trabajo de la inteligencia; solamente para esta persona tendrá algún interés una vida espiritual, una vida después de la muerte. Para las demás personas esta vida sería un tormento, sería constante sufrimiento. El propio Cristo dijo (Lc 12:34): “Pues donde esté la riqueza de ustedes, allí estará también su corazón”. ¿Qué es un tesoro? Es algo valioso para tu mente, que naturalmente obtiene su entera atención. Si ocupas tu mente apenas con “tengo que pagar esta deuda, necesito cumplir aquello, tengo que arreglar esto…”, o sea, esté solamente en la vida biológica, al morir ella seguirá en la vida biológica, seguirá funcionando después de la muerte en el mismo proceso, porque este es tu tesoro. Sin embargo este tesoro estará lejos y ajeno a usted. Esto, mi estimado, es el infierno.
Sobre la meditación, se debe tener como base un tema que ya haya atraído la atención. De hecho, existe un libro clásico, una gran obra sobre la meditación llamado “Opúsculo sobre el arte de aprender y meditar”, de Hugo de San Víctor. Dicho autor fue un pensador que vivió en la transición del século X para el XI, el mismo afirma que una de las actividades más importantes de la vida humana es meditar, la vida humana en sí es meditar.
Sin embargo, el mismo autor dice que la meditación es imposible sin la recolección de cierto material acerca de la meditación, porque toda meditación trata sobre algo. ¿Dónde encontrarás tales temas? Existen apenas dos fuentes de temas para la inteligencia humana: la naturaleza y los libros.
Sobre la meditación, se debe tener como base un tema que ya haya atraído la atención. De hecho, existe un libro clásico, una gran obra sobre la meditación llamado “Opúsculo sobre el arte de aprender y meditar”, de Hugo de San Víctor. Dicho autor fue un pensador que vivió en la transición del século X para el XI, el mismo afirma que una de las actividades más importantes de la vida humana es meditar, la vida humana en sí es meditar.
Sin embargo, el mismo autor dice que la meditación es imposible sin la recolección de cierto material acerca de la meditación, porque toda meditación trata sobre algo. ¿Dónde encontrarás tales temas? Existen apenas dos fuentes de temas para la inteligencia humana: la naturaleza y los libros.
Si tuvieras más dinero, tus problemas con las deudas nada más cambiarían de escala y existirían de igual manera. Si tuvieras un billón de dólares, tus problemas con las deudas serían en la escala del billón de dólares. ¿Porqué? Porque esto forma parte de un mecanismo cíclico sin salida. Es como nuestra necesidad al alimento, sueño o al sexo… Son elementos que forman parte de un mecanismo cíclico, al igual que un reloj. Después que se completa la vuelta en el reloj, necesitarás de las mismas cosas nuevamente. Esto no es vida; es un mecanismo que pertenece a nuestra dimensión natural o biológica nada más.
Es únicamente en la parte intelectual y espiritual que alguien posee una vida; o sea, que existe un proceso de desarrollo constante, que no se repite, pero que se extiende cada vez para universos más amplios. Solamente en esto existe un progreso real; solamente esto pone a alguien en una dimensión netamente humana. Solamente esto nos diferencia de los animales... No lo es nuestra forma de pagar las deudas con dinero, Los animales la pagan con su esfuerzo físico, el buey por ejemplo tiene que caminar para comer el pasto; nosotros lo pagamos con dinero, este papel representa el esfuerzo físico, es la misma cosa.
Les dejo una propuesta de reflexión: si existe una vida después de la muerte, ella es un suplicio para quien no haya vivido una vida intelectual y espiritual antes de la muerte. Ella es solamente perder todo que se tenía.
Es únicamente en la parte intelectual y espiritual que alguien posee una vida; o sea, que existe un proceso de desarrollo constante, que no se repite, pero que se extiende cada vez para universos más amplios. Solamente en esto existe un progreso real; solamente esto pone a alguien en una dimensión netamente humana. Solamente esto nos diferencia de los animales... No lo es nuestra forma de pagar las deudas con dinero, Los animales la pagan con su esfuerzo físico, el buey por ejemplo tiene que caminar para comer el pasto; nosotros lo pagamos con dinero, este papel representa el esfuerzo físico, es la misma cosa.
Les dejo una propuesta de reflexión: si existe una vida después de la muerte, ella es un suplicio para quien no haya vivido una vida intelectual y espiritual antes de la muerte. Ella es solamente perder todo que se tenía.
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Instituto ICLS
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Traducción y Revisión: Dyefersson Richter; Henrique Dreyer.
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